sábado, 10 de marzo de 2018

Discurso bienvenida nuevo Consejo Regional e Intendente


Muy buenas tardes a todos y todas en sus cargos y dignidades, a la comunidad que ha venido a celebrar esta actividad republicana. Saludo con especial atención al Intendente Juan Masferrer Vidal, a Pablo Silva Amaya, a sus respectivas familias. Permítanme saludar con especial afecto a las Consejeras y Consejeros que terminan este ciclo y con fraternidad a quienes se erigen hoy en representantes regionales.

Es propicia la oportunidad para dirigir a los presentes un discurso que concentre su esfuerzo en un apretado recuento, el agradecimiento por los esfuerzos colectivos y un puñado de propuestas para el periodo que se abre.

Pero este día quisiera charlar sobre algunos conceptos que me parecen pertinentes de traer a colación, por la relevancia y proyección de este acto cívico, replica provinciana de tantos otros que se están llevando a cabo (y que ilustrador para lo que quiero decirles es que deba apuntar que uso la palabra "provinciana" no en un sentido peyorativo).

Un exintendente recurrente de nuestra región (me refiero a Don Juan Núñez y ya se que lo cito como si fuera un prócer Radical, como Don Anselmo Sule o Don Esteban Leyton) Don Juan, quien nos enseñó a tener respeto y cariño por nuestra actividad como políticos, recuerdo que en un discurso de aquellos logró hacer una síntesis gráfica del progreso que ha visto la región de O'Higgins en estos últimos casi treinta años y que trataré de actualizar desde la mirada del CORE, claro que sin contar con el recurso retórico de este vecino de Rancagua.

Vean ustedes, el Teniente varía hacia una producción automatizada en nuevos niveles de su mina, ajustándose a los requerimientos de Chile y el mundo en cuanto a productividad, seguridad e innovación. La producción de energía va cobrando cada vez más relevancia en nuestro Producto Interno Bruto regional. El paso de baja altura Las Leñas, impulsado con tanta fuerza por nuestro querido Don Luis Díaz Solís, año a año se consolida como un proyecto concreto de integración y proyección económica que debe fortalecer a la región. La ruta costera y la inversión en nueva infraestructura en Bucalemu, Pichilemu y Navidad han transformado las oportunidades en realidades para nuestros habitantes costeros. Hemos generado un programa piloto de operaciones para enfermos del parkinson, que pueda servir para que Chile asuma el desafío. Logramos introducir el cambio en la ley de Agua Potable Rural que permitirá financiar desde el FNDR los generadores eléctricos de respaldo, tan necesarios en momentos de emergencia. Cada Consejera y Consejero estuvo desplegado en silencio por todo el territorio regional en los días tristes de los siniestros del verano antes pasado y vimos con alegría, en esos días, lo importante que había sido el trabajo estratégico, ordenado, institucional con Bomberos de Chile y que inauguramos años atrás con Doña Jaqueline Vidal que presidía la comisión social.

Pero en O’Higgins también debo destacar innovaciones señeras para Chile, pues años atrás constituimos un complejo Centro de Investigación del agua, el primer Centro de Negocios del país, lo que después se convirtió en una exitosa política nacional, con Centros constituidos por todas las regiones. Y hace poco porfiamos con un Proyecto Estratégico Regional en Hortalizas, que dio como resultado a Horticrece, una gerencia que ha apalancado casi tres mil millones de pesos en un año, organizando un negocio que ofrece una salida próspera a los Prodesal y hortaliceros de O'Higgins, con alimentos saludables para ese tremendo mercado que es Santiago e innovaciones que suman valor.

Menciono “Santiago”, nuestros vecinos, ya no como la maldición de la región, como solíamos decir hasta hace poco, porque en estos años pasamos de tenerles miedo y culparlos de nuestros males, nuestro atraso, a concebir nuestro desarrollo como una tarea colectiva posible, que no requiere excusas: eso también explica el desarrollo de uno de los proyectos históricos emblemáticos al que hemos tenido oportunidad de asistir, la Universidad de O'Higgins, cuya dotación profesional fue reclutada con estándares académicos altísimos, con una matrícula nutrida por jóvenes de todo el país, pero fundamentalmente de esta tierra, lo que confirma que tenemos una juventud que usa las oportunidades y familias que esperaban con ansiedad que ellas estuvieran disponibles para mejorar la vida, como la política de gratuidad. Sumemos ahora la creación del Centro de Formación Técnica y la oferta de educación terciaria se consolida aún más.

Pero punto a parte merece el desconocido origen del cambio de percepción que tuvimos respecto a la Capital y que ilustra una faceta desconocida del Gobierno Regional, tal es que el cambio de mirada vino de una misión al extranjero, las que han buscado no solo aprendizajes, sino por qué no, poner a la región de O’Higgins en el contexto internacional, con relaciones fructíferas con Malargüe y San Rafael en Argentina, otras que deben madurar como con Berlín y Baviera en Alemania, o Corea; otras que gatillaron sinergias increíbles, como las relaciones institucionales con el Estado de Delaware y más recientemente con el Estado de Oaxaca. O nuestra adscripción a la Organización de Regiones Unidas ORU-FOGAR, que abrió la puerta al resto de las regiones de Chile para integrar esta organización de regiones al alero de la ONU.

No he querido ser mezquino al fijarme solo en estos referentes para ilustrar el cambio que ha operado en la región, solo es que no quiero abusar de la atención de ustedes para fijar el que creo es el centro o corazón de estos proyectos modernizadores de O'Higgins, y que develarlo, establecerlo y enunciarlo es tremendamente importante en un acto cívico como el que estamos viviendo acá.

Cada realización extraordinaria, cada una de estas joyas de corona que he enunciado no son solo cemento y fierro, no son números de inversión, son esperanzas hechas realidad, que no serían posibles de no mediar la colaboración. Y permítanme aquí hacer un alto para agradecer en la persona de Don Jorge San Martín, Secretario Ejecutivo y ministro de fe del Consejo, a cada uno de los colaboradores, técnicos y profesionales, a los trabajadores, desde los guardias a las señoras del servicio, quienes con su fortaleza, gentileza y amabilidad nos ayudan a servir el cargo.

Mis colegas del Consejo Regional que cesa, me miraban con reticencia hace años  cuando sostenía, en medio de un debate, que es imposible replicar el escenario de "oficialismo y oposición" en un Gobierno Regional, ya que la Ley establece que un Gobierno Regional está constituido por el Intendente, representante de la Presidencia Nacional y un Consejo Regional electo democráticamente, legítimo representante de la ciudadanía y es esta comunión institucional la responsable de la marcha estratégica de la región. Y es obvio que cuando usted discute la oportunidad o cantidad de una inversión en la gente de O'Higgins, mediante el financiamiento de un Cesfam, una pavimentación, nuevas áreas verdes, en fin, no cabe nuestra legítima diferencia ideológica, por ello el Core procura discurrir con los Intendentes, visitar las comunas, conversar con la gente y ser fiel a la esperanza que tienen nuestras vecinas y vecinos, cualquiera sea su origen económico, social, cultural, migrante o no, todas y todos tienen la esperanza de un buen Gobierno Regional.

Nosotros hemos aprendido que ello exige tolerancia y buena voluntad de todos y también, apego irrestricto al principio de buen gobierno, por ello el Core de O'Higgins, junto a las otras regiones, debe seguir empujando la iniciativa de profundizar y mejorar la descentralización y la regionalización, en el marco de un país unitario, pues confiamos en que poseemos las capacidades que sustenten nuevas competencias en el ámbito del Gobierno Regional.

Ya ven ustedes, el Consejo Regional no es un accidente en el desarrollo de la región, ni un problema que salvar para los intendentes y seremis. El Intendente propone y el Consejo Regional dispone y esta prerrogativa debe ser celosamente cuidada en beneficio de una relación virtuosa entre el poder central y las aspiraciones y sueños de los habitantes de la región, el soberano que mandata a unos y a otros a hacer con voluntad y dedicación lo que, como decía Don Juan Núñez, un político debe hacer: convertir en realidad concreta los sueños hasta de la más humilde o apartada de las comunidades que componen nuestra región de O'Higgins, ese fue el ánimo de quienes hoy terminan y sigue siendo el tremendo desafío al que estamos convocados en el Gobierno Regional que hoy se inaugura. Colegas Consejeros y Consejeras Regionales, Intendente Juan Masferrer, autoridades presentes, siento orgullo de ser yo, un hijo de obreros de campo, un ex profesor de escuela, un vecino de la comuna de Peumo, como Presidente del Consejo Regional de O’Higgins quien le extienda la mano fraterna y le salude en este primer día de Gobierno.

Que el Creador nos de Fuerza, Unión y la Salud necesaria para acometer la tarea.

Muchas gracias!